jueves, 3 de enero de 2013

Y CUANDO PARECES HABER OLVIDADO... SUCEDE EL MILAGRO

Cuando eres madre y más si eres primeriza el dormir noches completas desaparece de tu vida. Debo decirles, que desde que tenía 7 meses de embarazo no he dormido una noche completa.
 
Al nacer mi bebé esto ha sido imposible, ya que mi linda niña no es de esos bebitos que desde los 2 meses duermen como angelitos sin despertarse. Ella es una niña buena que no hace berrinches en las noches, pero luego de cuatro o cinco horas de sueño se despierta para comer otra vez, esto sucede siempre en la madrugada y aunque hay días que me hago la dormida, invitándola a dormir nuevamente al mirar su cuna unos ojitos me dicen “se que estás despierta y tu sabes qué quiero”. Y no queda de otra que amamantar a mi linda niña.
Estos días festivos mi realidad ha sido peor, con salidas pertinentes, el papá todo el día en casa, mi hija no quiere dormir a las horas acostumbradas esto hace que su mamita descanse menos y el cansancio ha aumentado en enormes cantidades.
Tratando de hacer las cosas más llevaderas, decidimos que era el tiempo de pasarla a su habitación, pero mi niña no se acostumbra y sus cinco horas seguidas de sueño bajaron a tres, que gran dilema y cuanto agotamiento.

Sin embargo, anoche sucedió el milagro mi bella princesa me dio el regalo de nuevo año, al dormir desde las nueve de la noche hasta las cinco de la mañana, por primera vez en ocho meses, volví a recordar y disfrutar lo magnífico que es dormir una noche completa y vaya espero que de ahora en adelante esto sea lo más frecuente en mi vida otra vez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario